La adherencia o cumplimiento del tratamiento no solo aplica a la salud mental, sino también a la salud física —y ambas están profundamente entrelazadas. Cuando hablamos de adherencia, nos referimos a que las personas sigan las recomendaciones y prescripciones de sus profesionales de la salud, algo fundamental para alcanzar buenos resultados clínicos.
A continuación, algunas razones claves por las cuales es esencial mantener la adherencia al tratamiento:
- Efectividad del tratamiento: Para que un tratamiento sea eficaz, debe seguirse de forma constante y tal como ha sido indicado por el profesional. No cumplir con esto puede reducir o anular los beneficios del mismo.
- Manejo de enfermedades crónicas: En condiciones como diabetes, hipertensión, depresión, ansiedad o VIH, la adherencia permite mantener la enfermedad bajo control y prevenir complicaciones futuras.
- Reducción de síntomas y mejora de calidad de vida: Seguir el tratamiento puede disminuir los síntomas de condiciones como ansiedad, artritis, enfermedad de Parkinson o esquizofrenia, mejorando el bienestar diario.
- Prevención de recaídas y resistencias: Abandonar tratamientos antes de tiempo, como los antibióticos, los antidepresivos, los estabilizadores de ánimo o los antipsicóticos, puede provocar recaídas o que las enfermedades se vuelvan más difíciles de tratar.
- Minimización de efectos adversos: Respetar la dosis y el régimen indicado ayuda a reducir efectos secundarios no deseados o peligrosos.
- Reducción de costos: El incumplimiento puede llevar a mayores gastos en salud, incluyendo hospitalizaciones, más pruebas o tratamientos más invasivos.
- Mejora en la relación médico-paciente: La adherencia genera vínculos de confianza y colaboración con los proveedores de salud.
- Apoyo a la investigación médica: En estudios clínicos, seguir los tratamientos permite obtener resultados válidos y útiles para toda la comunidad.
- Contribución a la salud pública: Cuando las personas siguen tratamientos, se previenen brotes de enfermedades infecciosas y se ofrece un modelo esperanzador a quienes atraviesan situaciones similares.
En resumen, adherirse al tratamiento no solo impacta al individuo, sino que también fortalece los sistemas de salud y promueve el bienestar colectivo.
Y un recordatorio muy importante: actualmente enfrentamos una escasez significativa de profesionales de la salud. Cuando un paciente no asiste a su cita sin previo aviso, no solo pierde su oportunidad, sino que también impide que alguien más —tal vez en lista de espera— reciba la atención que necesita. Valora tu tiempo y el de los demás. Si no puedes asistir, notifícalo con anticipación. Cada espacio cuenta.
Nota: este artículo no representa una relación médico paciente, de tener una emergencia psiquiátrica o emocional, llame al 9-1-1 o 9-8-8 o visita la sala de emergencias más cercana.
Wilnelya Morales Rosado, MD
Médico Psiquiatra